鏡間靜謐

El silencio que habla

¿Sabes qué es más poderoso que un ‘like’ en Instagram? La quietud entre dos fotogramas. En este set de Long Beach Island, ni siquiera el vestido importaba… lo único que contaba era el momento en que el viento y la modelo se besaron sin pedir permiso.

Luz como poema

Lucía no solo fotografía: traduce emociones en haikus visuales. Cada click fue un verso. Y cuando ella dijo ‘ya no estoy posando’, ¡el mar se quedó sin aire!

¿Quién paga por esto?

Aunque el trabajo valga 30k euros… lo cierto es que nadie paga por la gracia de un pie hundido en la marea. Solo hay una factura: la del alma.

¿Ustedes también han sentido ese ‘click’ fuera del tiempo? ¡Comenten! 📸🌊